Esta planta de la empresa Madrileña Cardiles Oil Company, esta operando con el sistema del profesor japonés Sato Murata, del instituto de Ondas Quánticas de Kobe—Japón , mediante el cual, cualquier materia que contenga carbono e hidrogeno se puede transformar en hidrocarburos, gasolina, queroseno, o gasoil.
Los residuos de orujo de aceitunas, han resultado excelentes para su aprovechamiento, y producir biocombustibles, reduciendo el problema ambiental de acumulación de residuos, que no están siendo reutilizados.
Datos estadísticos;, 30.000 toneladas de “orujo” producen 10.000 toneladas de biocombustible, suficientes para abastecer 20.000 coches cada año, y reducir la emisión de CO2—gas de efecto invernadero—en un 80%.
Seria necesario que las Universidades apoyaran estas iniciativas, creando la carrera de QUIMICO AMBIENTAL profesional que ayudaría a proteger nuestro Planeta, de tantos desechos residuales no aprovechados, mejorando a su vez la calidad de vida.
Eduardo Poo Rodríguez
ONG MADRE
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