Escrito por Eduardo Poo
Martes, 24 de Febrero de 2009 04:05
El señor director se encuentra en una reunión muy importante. Esta es una de las mentiras más usadas por las secretarias, puede sospecharse que no es verdad, pero queda la duda, pero siempre es mejor que decir, el director no quiere recibirle porque usted es un pesado, la mentira aunque sea piadosa, está siempre presente en nuestras vida.
Pero también existen los profesionales de la mentira, y estos orientan esa habilidad en la política, y pueden engañar a la mayoría de la gente la mayor parte del tiempo, y pueden ser tan convincentes que terminan creyendo sus propias mentiras, pero como decía mi abuela, la mentira tiene la pata corta.
Todos mentimos. Por conveniencia, por vergüenza, por interés, por respeto, por necesidad, por piedad, por desesperación, por defendernos de algo, o finalmente, ¡por el gusto de mentir! , ejemplos de mentiras las tenemos a montones en la vida diaria.
Tómese la molestia y lleve un registro de las mentiras que dijo en el día, y después me cuenta. Nuestra sociedad esta basada en gran parte en la mentira, ¿se imaginan el horror de un mundo absolutamente sincero? que los amigos, las mujeres, los médicos dijeran siempre la verdad.
Por lo tanto el habito social de mentir ha elevado a la mentira a la categoría de arte, Hitler decía; entre más grande es la mentira más fácil es de creer, porque después de todo, el concepto de verdad y mentira es bien relativo. Los escritos sobre la psicología del testigo, donde 100 personas presencian un suceso pocas personas lo relatan como realmente sucedió, los demás inventan datos de su cosecha, lo magnifican o lo deforman, y lo hacen de buena fe.
Es que al percibir la realidad uno la interpreta como quisiera que fuera, la mentira mas difícil de combatir es la que tiene una parte de verdad, como decía un filósofo, ¡que nunca me falte una amable mentira, cuando alguien me pida una opinión sincera!
Eduardo PooONG MADRE
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